Estaba yo trabajando en una fábrica…
La directiva decidió comprar una máquina…
Eligieron lo que necesitaban según el proceso…
El fabricante trajo la máquina y la puso en marcha…
Y la máquina quedó funcionando.
Hasta aquí, el mismo proceso.
En varias fábricas.
En una ocasión yo era el jefe de mantenimiento…
En otra el técnico externo…
En otra jefe de turno…
En otra Progressive Maintenance Leader (no es el título de una canción).
La cuestión es que la historia es muy parecida siempre.
Pero el final cambia.
Mucho.
Radicalmente.
En una ocasión la máquina quedó funcionando perfectamente.
En otra hubo que retocar cosas.
En otra la máquina se devolvió al proveedor.
En otra…
Te podría contar la historia de cada una.
Pero prefiero ir directamente a las conclusiones, que creo que es lo que más te interesa.
Hay un denominador común entre los proyectos que se empiezan y terminan sin problemas.
El mismo que hace que algunas máquinas nunca lleguen a funcionar.
La repetición.
Cuando fabricas una máquina nueva, todo es nuevo:
- La idea
- Los sistemas que componen la máquina
- Los esquemas eléctricos
- …
Es casi imposible hacerlo todo bien a la primera.
Si además hablamos de una máquina industrial, con miles de piezas, peor todavía.
En este caso no estamos hablando de una máquina.
Se trata de un prototipo.
Esta es la palabra clave.
Repite conmigo:
PRO – TO – TI – PO.
Hay personas a las que les cuesta decirlo.
Creen que han comprado una máquina perfecta.
Han pedido al fabricante un montón de cambios, y que además sea barata.
Cuando está en marcha, aparecen los problemas.
Y todo el mundo se echa las manos a la cabeza.
Parecemos nuevos.
Has comprado un prototipo, por si no lo sabías.
Ojo!!
Comprar prototipos no es ni bueno ni malo.
Simplemente debes ser consciente.
Porque sabiéndolo, te enfocarás en resolver los defectos y carencias para conseguir una máquina fiable y estable.
Si te enfocas en echar la culpa al fabricante, no avanzas.
Sobre todo, antes de la compra, decide si quieres comprar un prototipo o no.
Si no quieres pasar por el proceso de retoques y mejoras, de versiones 2.0, 3.4, 100.20…
No compres prototipos.
Busca a un fabricante que ya tenga muchas unidades de la misma máquina en el mercado.
Que tu máquina sea una más.
Que otros hayan hecho de beta testers antes que tú.
Pero no todo son ventajas.
A veces te interesa comprar prototipos.
Porque puedes personalizarlos según tu proceso o tu producto.
Normalmente el fabricante está abierto a escucharte y ayudarte con los rediseños.
Así puedes conseguir máquinas exclusivas a un precio más competitivo.
¿Sabes?
Con el software pasa algo muy parecido.
FidesGeM empezó como un prototipo.
Nació siendo un sistema que funcionaba, pero necesitaba algunos retoques.
Poco a poco se fue mejorando.
Los primeros usuarios planteaban sus necesidades.
Casi todo se volcaba en forma de mejoras.
Cada versión era mejor que la anterior.
Ahora FidesGeM se llama Zafirplan.
Las modificaciones son más pequeñas.
Pequeños cambios para perfeccionar la aplicación.
Seguimos escuchando a los clientes, aunque algunos cambios que proponen no son aceptados.
Porque no mejoran el uso para todo el mundo.
Por eso te interesa cuanto antes formar parte de la comunidad de usuarios de Zafirplan.
Porque si me explicas algo que te puede servir, y veo que también puede ser útil al resto de usuarios, es posible que lo implementemos.
Sin que tengas que pagar por esa modificación.
Según la comunidad de usuarios crece, cada vez recibimos más propuestas de modificaciones.
Así que ya no estamos con un prototipo, pero tampoco con un producto completamente inalterable.
Tenemos lo mejor de ambos mundos.
Porque todavía tenemos capacidad de cambiar cosas, que es algo difícil de encontrar en las grandes empresas de software.
Y también tenemos un sistema probado en muchos entornos distintos, lo que garantiza estabilidad desde el primer día.
Pruébalo cuando quieras:
Empieza a usar Zafirplan hoy mismo.
Y tú ¿eres más de prototipos o de sistemas bien probados?
PD: Esta semana hemos actualizado Zafirplan, con algunas mejoras que agilizan el uso. Si todavía estás probando la demo de 30 días, puedes usar el mismo enlace de descarga que recibiste para actualizar a la última versión.
PD3: Este artículo es una copia de un correo que envié en 2022. Cada día envío un email, y muy pocos los publico aquí. Si quieres recibirlos, apúntate haciendo clic aquí. Si no estabas, nunca sabrás lo que escribí ayer.
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